miércoles, 24 de septiembre de 2008

Sabores

Tu mirada en mi boca,
tus manos apretando fuerte las mías,
cada gota de sudor sueña con pasar
de mi cuerpo al tuyo,
y de tu pecho a mi pecho...

y tú,
sobre mi.

Y el sabor de tu piel
se me agolpa,
y el brillo de tus ojos...

y te tiembla la voz.

Me saben a vida los gemidos
de tu alma.