Huelga en Osakidetza
Buenos días. Hoy solo vengo a comentar la huelga del personal de la sanidad pública. Voy a intentar no faltar a nadie. Primero. Tienen todo el derecho a hacer huelga, faltaría más. Yo ahora vengo y cuento mis pequeñas experiencias con los médicos y demás currelas de la sanidad pública.
Desde pequeño sufro de unas importantes reacciones alérgicas. Vamos, nada, como que he estado bien cerquita del túnel y la luz blanca en alguna ocasión. La respuesta de la sanidad pública: "chaval, te dan alergia un montón de cosas, no sabemos muy bien a qué, pero bueno, si ves que te da muy fuerte, pues te vienes, y si no llegas... bueno, tu vienes". Molaaaa. Les contaré una historia graciosa sobre aquella tierna juventud en la que me sometía a menudo a pruebas de alergias. Uno de los múltiples días en los que perdía en torno a 6 o 7 horas en el hospital, básicamente esperando, decidieron realizarme una pruebita de esfuerzo. "A ver chaval, te vas a poner a subir y bajar estas escaleras hasta que te llame". Y el chaval que era tonto y asmático se pone a subir y bajar. Al cabo de un rato, le dice el chavalín a su ama, "oye que me encuentro mal", "tranquilo que vendrán ahora". Al cabo de más o menos una horita, con el hígado fuera, y un poquito asfixiado (es lo que tiene el asma), el chaval se para, se avisa a la enfermera que ahora estará haciendo huelga y la respuesta de la enfermera es, "uy, pero si nos habíamos olvidado de ti"
Seguimos pues con las experiencias gratificantes. También sufro ciertos problemas de espalda, derivados de una pequeña deformación en la cadena. Muy pequeña. Que se podría haber corregido en el periodo de crecimiento. Pero durante ese periodo, todos los médicos aseguraron que tenía una pierna más larga que otra, que era muy normal, y que con una plantillita valdría. Resultado, la espalda echa mierda, y hasta que acudo a la sanidad privada, nadie me dice nada. Pues bueno, nada. Sin más.
Posteriormente, sufrí algunos problemillas al romperme casualmente un par de ligamentos en el tobillo. "Aspirinas, toma aspirinas", "oye, que soy asmático", "ah, entonces toma otro analgésico". De nuevo sanidad privada.
No quiero olvidarme de las innumerables esperas en urgencias con reacciones alérgicas bastante graves o con los ligamentos de la rodilla hechos mierda, compartiendo café y experiencias con enfermeras y celadores. O aquella vez que mi hermana con otra grave reacción alérgica (es lo que tiene la familia) esperó durante 8 horas hasta que desapareció la misma (podía no haber desaparecido), viendo como conocidos de los empleados allí presentes esperaban no más de media hora por su gripe. Por cierto sigo esperando la respuesta a la queja interpuesta. O aquellas tres punciones lumbares mal realizadas, o la anestesia general sin permiso de mis padres siendo ella menor. Vamos anécdotas divertidas. Por cierto, se me olvidada la pequeña inclinación de mi meñique, por aquello de no saber poner un vendaje o algunas otras cosas divertidas sobre mi rodilla.
Eso sí tienen todo el derecho a hacer huelga, que entiendo que cobran poco, y tienen una responsabilidad grande, porque no se cubren unos a otros cuando la cagan. Les apoyo en su huelga, hoy no pienso ir al médico. Espero no haber ofendido a nadie. Os quiero a todos, sobre todo si trabajáis en la sanidad pública. Por cierto, yo también necesito un mínimo de 11 años de formación (en realidad más) si quiero ser investigador. Me pagan menos, mis condiciones laborales son peores (no tengo horario, varía en muchas horas del día o todas las del día), y mi valoración en la sociedad es nefasta. Ah, por cierto. Muchas gracias por los momentos compartidos, os quiero.
Suerte con la huelga.
2 comentarios:
Joder macho, lo tuyo con Osakidetza es de juzgado de guardia.
Pero han sido grandes momentos. He aprendido un montón de medicina. A ver si tienen suerte con la huelga...
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