jueves, 24 de abril de 2008

Y sin embargo...

Ya no más sonrisas de niño,
no creo en las hadas,
no creo
en las hadas,
no creo en las hadas...

Y sin embargo,
su pelo sigue siendo
tan intensamente
negro,
tan rizado que solo pienso
entre ellos, mis dedos...

Y sin embargo,
su sonrisa sigue siendo
tan hermosa,
que añoro el beso,
el susurro,
el dolor en mis labios...

Y sin embargo,
sus manos siguen siendo
tan cálidas,
tan cercanas en la lejanía,
y su abrazo tan fuerte,
que solo espero
recoger frutos a su lado...

No creo en las hadas,
morid,
que se joda Peter Pan,
y sin embargo...

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